martes, 18 de diciembre de 2012

LAGO - JARDÍN Capitulo 2




LA MAESTRA


El taxista sacó sus maletas del coche y se despidió de ella.  Nai quedo sola. Se sentía un  poco confusa pues esperaba que el alcalde hubiese ido a la estación a recogerla, pero no fue así, y cansada de esperar decidió marcharse en un taxi que la dejó delante de su casa. Y allí estaba, con el pesado equipaje, dispuesta a subir poco a poco la escalera que le conducía a su nuevo hogar.



Con desgana, al pensar en el esfuerzo que iba a tener que hacer hasta llegar arriba,  se dispuso a recoger las maletas, y en ese momento una  voz sono tras de ella....


-Disculpe!!..disculpe señorita!!....


Nai se giró y vio a un apuesto joven dirigirse hacia ella 


-Déjeme ayudarla -Dijo el joven desconocido.


-Oh!! gracias, muchas gracias.


El joven asió una maleta con cada mano y se dispuso a seguir a la muchacha. 

-Vivo aquí mismo – dijo ella señalando la escalera - me haría un gran favor solo con dejarlas en la puerta, arriba de la escalaera


-Como usted quiera. No hay ningún problema – contestó el  -.



El improvisado botones comenzó a subir los peldaños, su intención era dejarlas delante de la puerta, sabía que ofrecerse a entrarlas en la casa no sería una acción muy correcta por su parte.
 

Nai subió tras él, le agradeció su caballerosidad y el favor que le había hecho. Fue cuando el joven se presento estrechándole la mano.


-Mi nombre es Martin, soy nuevo en el pueblo, bueno – dijo soltando una pequeña carcajada -  de hecho soy el médico, el  Dr. Martin


-Vaya!! encantada, yo soy Nai, la nueva maestra – contestó la muchacha sorprendida -


-Oh, eso es estupendo. ¿Entonces también es usted nueva por aqui?


-Si, como puede ver  acabo de llegar. Tenía que recogerme el alcalde en la estación pero no se que ha podido pasar, no ha aparecido nadie. Bueno…  nadie escepto usted… - dijo sonrosándose un poco -




Nai abrió la puerta de la casa y Martin supo que era el momento de despedirse.


-Bien, Sta Nai, si necesita algo, ya sabe, puede buscarme en la consulta.


-Gracias, aunque siendo usted medico espero no tener que ir a verle muy a menudo. -Dijo Nai bromeando –


- sí,  es cierto!!  – respondió el soltando un par de carcajadas -


A Martin le costaba decidirse a marchar. Por alguna razón se sentía bién hablando con aquella profesora. Tras unos segundos en los que ninguno de los dos supo ya que decir,  Martin decidió, muy a su pesar, que era el momento  de la retirada.


-Bueno, he de marcharme ya, que pase un buen día Sta. Nai.


-Lo mismo digo Martin, oh perdon, Dr Martin.


Martín contestó riendo 


-  puede llamarme solo Martin.


-Está bien Martin, y gracias por ayudarme con las maletas, ha sido muy amable.


-Ha sido un placer. Adiós Sta. Nai. – dijo el joven mientras se disponía a marchar -


-Adiós - contestó ella -


Martin bajo las escaleras y tomó el camino de su casa. El también acababa de llegar y tenía maletas y cajas que deshacer. Además aun no conocía su nueva consulta, que según  le había advertido el propio alcalde por teléfono, necesitaba ciertos arreglos.



Nai entro en casa con su equipaje. La breve conversación mantenida con el Dr. Martin le había causado muy buena impresión.  



Tras inspeccionar un poco su nuevo hogar, se sentó en la cama, había sido un día duro y se encontraba cansada, y a su pensamiento llegó  todo lo que había dejado atrás, el paso tan importante que acababa de dar marchándose a vivir lejos de su familia,  a un lugar desconocido y  lejano. Allí quedaron sus amados padres, sus amigos y todo aquello que le era familiar, ahora le tocaba  empezar una nueva vida. No tenía miedo, su deseo de dar clases a los niños era muy poderoso nada más importante que tener la oportunidad de enseñar a los más pequeños. Enseñar y educar. Tan solo por eso, que no era poco, Nai hubiera dado la vuelta al mundo si hubiese sido necesario. Ser maestra era la ilusión que había tenido desde siempre, era su verdadera vocación.



Sentada en la cama Nai sonrió. Lo había conseguido, allí estaba,  sola, en un lugar lejano, con gentes desconocidas y con un futuro incierto. Todo un reto.


10 comentarios:

  1. Me ha encantado, espero sigas con la historia, deja entrever muchas cosas, estoy ansiosa por el siguiente capitulo.
    Y or cierto la casa que se ve una maravilla

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  2. veo que se añade una nueva forastera al pueblo , a ver como sigue la historia entre estos dos jovenes

    besitos

    Mari

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  3. Vaya vaya, aquí a filing, me encanta,, ya estoy deseado ver como sigue.

    Besos. Mª Jesús

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  4. A nice beginning. There is romance in the air. It will be lovely to follow.
    Hugs, Drora

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  5. Ains como me gusta este blog me encanta la historia. besos

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  6. Hola: efectivamente un nuevo reto en una nueva vida. La casa es preciosa y el encuentro con ese médico tan caballeroso apunta maneras... vamos que habrá romance... ja, ja... muy buena historia y muy buenas fotos llenas de detalles muy reales... seguimos en contacto

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  7. ¡Mucha suerte, Nai!
    Seguiré la historia.
    Besitos

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  8. Menudo reto tiene Nai por delante, la chica ha sido valiente y seguro que consigue todo aquello que desea. Además me da la sensación que el doctor estará apoyándola siempre que lo necesite.

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  9. Me encantan tus historias,estoy deseando leer como sigue,besitos

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